Aunque a menudo se destaca al vino tinto por sus propiedades beneficiosas para la salud, en realidad son las moléculas de resveratrol las responsables de esta buena reputación.

Estudios recientes revelan efectos impresionantes del resveratrol: tiene un efecto antiinflamatorio, favorece el sistema cardiovascular y puede ralentizar el proceso de envejecimiento de nuestras células. Las investigaciones sugieren incluso que el resveratrol podría proteger contra la enfermedad de Alzheimer.

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Hace más de 2000 años, el famoso médico Hipócrates reconoció las propiedades especiales del vino y se dice que dijo: "El vino es una cosa maravillosamente adecuada para el hombre - si se usa sabiamente"

Y la llamada "paradoja francesa" también subraya esta idea: a pesar de una dieta a menudo rica en grasas y colesterol, los franceses tienen una tasa comparativamente baja de enfermedades cardíacas. Este fenómeno sanitario suele atribuirse al elevado consumo de vino tinto.

Sin embargo, ahora sabemos que no es el vino tinto en sí el que tiene estos efectos positivos, sino la sustancia vegetal resveratrol que contiene.

Ésta pertenece a los polifenoles y se encuentra en todos los colores de uva. Sin embargo, la concentración en el vino es tan baja que apenas puede conseguirse un efecto beneficioso para la salud, sin consumir una cantidad nociva de alcohol.

El resveratrol puede utilizarse como suplemento dietético tanto de forma preventiva como en el tratamiento de apoyo de enfermedades. Se dice que es especialmente eficaz para la inflamación crónica.

El efecto del resveratrol se basa la regulación de la inflamación. Influye en los principales mecanismos que controlan la inflamación en el organismo y reduce la liberación de sustancias y enzimas proinflamatorias y como resultado, puede frenar tanto la inflamación aguda como la crónica.

Los estudios con enfermos de Alzheimer también demuestran que el resveratrol puede tener efectos positivos en el cerebro. Puede reducir la inflamación del sistema nervioso central, aumentar el rendimiento cognitivo y mejorar la circulación sanguínea en el cerebro. Por tanto, el resveratrol, con su efecto antienvejecimiento, también podría formar parte de las estrategias de prevención y tratamiento de enfermedades como el Alzheimer. En la mayoría de los estudios se utilizaron dosis de entre 75 y 2.000 mg.

En otro estudio, en sólo tres días (250 mg de resveratrol junto con 20 mg de piperina), se produjo un aumento significativo de los niveles de hemoglobina. Un nivel bajo de hemoglobina puede aumentar el riesgo de demencia, ya que indica anemia. Esto reduce el aporte de oxígeno a las células cerebrales, lo que puede favorecer su muerte y contribuir a la demencia a largo plazo.

Los resultados obtenidos hasta ahora muestran que el resveratrol ofrece interesantes oportunidades para promover específicamente la salud cerebral.

El resveratrol no sólo es bueno para la salud, sino también para la piel. Por eso se utiliza a menudo contra el envejecimiento prematuro de la piel, ya que protege las células cutáneas de los daños, es decir, tiene un efecto antioxidante. Estos daños se deben, por ejemplo, a la luz solar, la mala calidad del aire o el estrés, y hacen que la piel envejezca más rápidamente. El resveratrol ayuda a prevenir estos daños para que la piel se mantenga tersa y firme durante más tiempo.

El resveratrol también puede activar una enzima especial del organismo que ayuda a mantener las células jóvenes durante más tiempo. Esta enzima hace que la piel envejezca más lentamente y pueda reaccionar mejor al estrés. Como resultado, las arrugas y otros signos de envejecimiento no se forman tan rápidamente.

Muchas personas beben un vaso de vino tinto por la noche para relajarse, pero, ¿por qué esto ayuda? La respuesta no es el vino tinto en sí, sino el resveratrol que contiene, lo que desencadena un efecto calmante.

Cuando estamos estresados, nuestro cuerpo produce más cantidad de una hormona llamada corticosterona. Esto es normal, pero en exceso puede saturar el cerebro. Esto activa una enzima llamada PDE4, que puede hacer que nos sintamos tristes, ansiosos o incluso deprimidos.

El resveratrol bloquea esta enzima PDE4, lo que significa que puede ralentizar el efecto nocivo de un exceso de corticosterona. Los estudios en animales han demostrado que el resveratrol ayuda a reducir la depresión y la ansiedad, se descubrió que el resveratrol ayudaba a aumentar sustancias importantes en el cerebro, como la dopamina, la serotonina y el neuropéptido. Este último, en particular, hace que el cuerpo sea más resistente al estrés, ayuda a evitar que nos pongamos ansiosos o tristes tan rápidamente en situaciones difíciles.

Muchos medicamentos para la depresión sólo tienen efecto sobre algunas zonas del cerebro, como la serotonina. Sin embargo, el resveratrol también actúa en esta zona y, por tanto, podría ser una solución mejor, sobre todo porque se dice que tiene menos efectos secundarios.

Nuestra conclusión: el resveratrol tiene un efecto positivo en muchas áreas de la salud

El resveratrol puede utilizarse con fines muy diversos, tanto si desea hacer algo bueno por su salud como medida preventiva, contrarrestar el estrés o padecer determinadas enfermedades. Numerosos estudios ya han arrojado resultados positivos que apuntan a un gran potencial para el futuro

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